Tegucigalpa, Honduras, April 1, 2021 — Luego de que la segunda gran caravana migrante del año que partía de Honduras fuera detenida antes de llegar a la frontera con Guatemala, el Comité Internacional de Rescate (IRC, por sus siglas en inglés) advierte que este es un síntoma de problemas más profundos que deben abordarse en la región.
Las condiciones de vida cada vez más complicadas en el norte de Centroamérica están contribuyendo a un aumento de los flujos migratorios. Históricamente, la violencia de pandillas y de género, la pobreza, la inseguridad y el cambio climático han sido la causa de que más de 712,000 personas sean desplazadas interna y externamente en Honduras, Guatemala y El Salvador cada año. Estos factores no cambiaron durante la pandemia por COVID-19, de hecho muchos empeoraron.
Después de una aparente disminución en el número de migrantes y solicitudes de asilo en México en 2020, debido a las medidas de salud pública y al cierre de fronteras en respuesta al COVID-19, la situación ya está cambiando en los primeros meses de 2021. En las últimas semanas, La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) informó que, solo en enero y febrero, más de 9,000 personas del norte de Centroamérica habían solicitado asilo en México, el 40% de las solicitudes presentadas en total el año anterior.
Meghan López, vicepresidenta regional del IRC para América Latina, dijo: “Como con cualquier crisis, quienes se encuentran en situaciones vulnerables son los que corren mayor riesgo. Ahora, un año después de iniciada la pandemia de COVID-19, sus efectos, junto con todos los demás desafíos preexistentes, están hundiendo a millones en el norte de Centroamérica en una crisis aún más profunda, por lo que es natural esperar que cada vez más personas se vean obligadas a huir.
Se necesitan cooperación y financiamiento internacionales para abordar las causas fundamentales del desplazamiento que hacen que miles de personas realicen un viaje desesperado, desde Centroamérica hacia México y Estados Unidos, buscando seguridad.
Países como Guatemala y México están tomando acciones para tratar de evitar que las caravanas lleguen a sus fronteras, a veces usando como excusa la falta de una prueba negativa de COVID-19. Sin embargo, buscar asilo es legal, incluso durante una pandemia y las personas continúan enfrentando los mismos desafíos que provocaron la migración y las peticiones de asilo desde antes de la pandemia. Los gobiernos deben garantizar un camino seguro para las personas, desde su país de origen hasta el de destino, así como poner en práctica políticas y sistemas de inmigración justos y humanos. Este no es el final del camino: las personas deben estar protegidas en todo momento, incluso si ya se les ha concedido asilo, para evitar situaciones trágicas como las muertes de Elvin Mazariegos o Victoria Salazar ”.
El IRC publicó recientemente un análisis de datos recopilados a través de CuéntaNos, parte del proyecto Global Signpost, una plataforma de información dinámica para personas como desplazados internos, migrantes y otras poblaciones vulnerables que buscan servicios. Abarcando el período de noviembre de 2020 a enero de 2021, el análisis identificó incrementos en la búsqueda de información sobre:
- Procesos de identificación y migración. Las visitas aumentaron un 500% de octubre a noviembre y un 1,500% el mes siguiente.
- Empleo. Desde diciembre de 2020 hasta enero de 2021, cuando se detuvo la primera caravana en Guatemala, las visitas aumentaron un 121% en Honduras y un 42% en El Salvador.
- Servicios y protección de la mujer. El número de visitas a páginas de apoyo a la violencia de género aumentó más del 100% en El Salvador.
Más sobre el IRC en el norte de Centroamérica
El IRC implementa su programación en colaboración con una red de 280 socios en Honduras, Guatemala y El Salvador al:
- Asistir a las víctimas de los dos huracanes mortales que azotaron en noviembre, incluida la protección infantil y el apoyo psicosocial, la distribución de kits de higiene y dignidad y programas de transferencias de efectivo.
- Difundir información verificada y confiable a través de la plataforma interactiva CuéntaNos y sus líneas de ayuda integradas con redes sociales y mensajería de WhatsApp, moderadas localmente por personal capacitado de IRC.
- Responder a las necesidades urgentes de mujeres y niñas en riesgo de violencia de género, brindando acceso a información y transferencias monetarias multipropósito y suministros básicos que son vitales. Parte del trabajo de protección del IRC, que también incluye a miembros de la comunidad LGBTQ+, además de mujeres y niñas, comprende los Espacios Seguros en El Salvador y Honduras. Estos espacios permiten a las personas afectadas por la violencia y el desplazamiento acceder a información a través de CuéntaNos, referencias, apoyo psicosocial y programas comunitarios.