Hoy, el Comité Internacional de Rescate (IRC, por sus siglas en inglés) celebra el fin del Título 42, una política que negaba a los solicitantes de asilo su derecho legal a buscar seguridad en los Estados Unidos, con 1.7 millones de expulsiones desde marzo de 2020.

El IRC ha visto los impactos negativos del Título 42 de primera mano a través del trabajo en los EE. UU., México y América Latina. Con base en esas observaciones, el IRC a principios de este año publicó Protection Denied, un informe con recomendaciones de políticas para garantizar un proceso de asilo seguro, ordenado y humano en los Estados Unidos, incluido un llamado para poner fin al Título 42.

Con la terminación del Título 42, el IRC renueva el llamado a la Administración de Biden para que tome más medidas para poner fin a las políticas de externalización fronteriza que ponen en riesgo a los solicitantes de asilo y para invertir en la capacidad de recibir a los solicitantes de asilo en los EE. UU.

Olga Byrne, Directora de Servicios Legales de Asilo e Inmigración en el Comité Internacional de Rescate, dijo:

Recibimos con beneplácito la noticia del fin del Título 42. Durante más de dos años, esta política dañina privó a miles de solicitantes de asilo del debido proceso, enviándolos de regreso a condiciones peligrosas, similares, si no peores, a aquellas de las que escaparon en México, el norte de Centroamérica, Haití y otros países.

Según el derecho internacional y nacional, las personas que necesitan protección tienen derecho a solicitar asilo en los Estados Unidos. A medida que el conflicto se intensificó en los últimos meses en todo el mundo, Estados Unidos honró este derecho a buscar seguridad, ofreciendo alternativas para personas de países como Afganistán y Ucrania. Pero no se pueden pasar por alto otras crisis y la terminación del Título 42 da la esperanza de que los solicitantes de asilo de otras partes del mundo tendrán la misma oportunidad de buscar seguridad en los Estados Unidos. Los sistemas de asilo y reasentamiento de refugiados del país deben proporcionar alternativas viables hacia la seguridad para todas las personas que huyen del peligro, independientemente de su país de origen, raza, religión, color o credo.

La terminación del Título 42 es un primer paso clave para garantizar que las personas que huyen de la violencia y la persecución puedan ejercer su derecho legal de buscar seguridad en los EE. en la frontera sur para procesar a las personas de manera humana y digna, e invertir en la capacidad comunitaria para acoger, incluso a través de albergues comunitarios en la frontera sur.